"Creo que ha sido un año que me lo he pasado llorando, un año muy complicado, con muchos altibajos, un momento complicado en la economía", dijo Raúl al recoger su reconocimiento. "Todo lo que pasa en el mundo, las guerras, machacan la economía y el mundo del vino...", lamentó, y luego dijo -quienes le conocen saben de su humildad nada fingida- que "recibir un premio siempre es increíble". "Somos gente que pasamos ciento cincuenta, doscientos días fuera de nuestra nación, y que en nuestra comunidad y en nuestro país se nos reconozca para mí es un gran orgullo", reconoció muy emocionado. "Muchísimas gracias por esto", dijoo al alzar su Espiga de Honor.
La sala Fundos de Valladolid acogía este miércoles la presentación de 'A fuego lento', película dentro de la categoría Cine Gourmet, que vincula la gastronomía al cine. Presentada por Roberto Lozano, esta fiesta de inauguración de Cine Gourmet de la 68 Seminci sirvió como pretexto para otorgar una de las Espigas de Honor de la edición. El homenajeado era unoo de los grandes embajadores de la comarca leonesa del Bierzo en el mundo, Raúl Pérez, enólogo, "cuyo legado ha influido de manera determinante en la historia del vino español", dijo Lozano.
"Raúl Pérez es un orgullo para el mundo del vino, dentro y fuera de España", prosiguió Lozano, queofreció a los asistentes algunos apuntes biográficos sobre el galardonado. "Nacido en Valtuille de Abajo, León, ha sido elegido dos veces como mejor enólogo del mundo, y su máxima es elaborar vinos siempre desde el respeto a la naturaleza. Nadie como Raúl sabe transmitir el valor del terruño, la metamorfosis del viñedo, el poder de la naturaleza".
Antes de la entrega de la Espiga de Honor, los compañeros de profesión de Raúl Pérez ocupaban la pantalla de la sala para homenajear a su colega través de un vídeo. "Enhorabuena por este premio y por todo lo que te han dado y te darán en esta vida. No sólo por hacer buen vino, sino por el gran corazón que tienes. Eres una gran persona y nos sentimos orgullosos de todo el tiempo que pasamos contigo. Por esa generosidad y por convertir el vino en un mundo agradable, placentero y de compañía", fueron algunas de las palabras que sus amigos quisieron transmitirle, además de las gracias a los patrocinadores de la Espiga de Honor: Ribera del Duero y Tierra de Sabor, informan desde la oorganización de la Seminci.
Tras las intervenciones, el esperado momento, la entrega de la Espiga de Honor a Raúl Pérez "por su valiosa contribución al mundo del vino, de la gastronomía, y por su apoyo a la promoción cultural de Castilla y León". Pérez, visiblemente emocionado, subió al escenario y recibió el premio de manos de Víctor Alonso Monge, entre los aplausos de un público entregado.
"Esto ni en los mejores sueños te pasa. He tenido un montón de reconocimientos, y conseguir la tercera estrella Michelin creí que era ya el último respiro, que mi vino ya no se entendía. Y ahora conseguir terminar este año de incertidumbre con este reconocimiento y todas estas palabras que me encogen el corazón. Al final lo más grande que hay en el mundo es que tus compañeros reconozcan tu labor", dijo Raúl, que quiso dar las gracias "a Seminci y a todo el equipo que lo ha hecho posible". "Es un premio para ellos", concluyó al borde de las lágrimas.
En agosto enamoró a la guía Parker con su vino La Muria
Aunque Raúl Pérez ya ha sido reconocido en dos ocasiones como Mejor Enólogo del Mundo (en 'Le Grand Tasting', el que dicen que es el festival de los mejores vinos, en Shanghai, en 2015 y 2016), otro de los grandes hitos para un hacedor de vinos "se le resistía" hasta la fecha. Desde este año, ya no, porque los codiciados 100 puntos Parker también llegaban este mismo año, en el mes de agosto.
Este verano se daban a conocer las puntuaciones para 'The wine advocate', la reconocida lista Parker, y el prescriptor de vinos español más reverenciado, el abulense Luis Gutiérrez, daba la nota más alevada -por fin- a un vino de Raúl Pérez que aún no había salido al mercado, La Muria, una joya enológica de la que sólo se han producido 700 litros y 900 botellas. Proveniente del viñedo de mayor altitud en el Bierzo en la localidad de Viariz, a más de 1.000 metros sobre el nivel del mar, este vino exclusivo tendrá un precio aproximado en el mercado de 180 euros.
"Nunca ha habido mejores y más interesantes vinos en el Bierzo que ahora", señalaba Luís Gutiérrez en su último informe para Robert Parker. Enamorado incondicional de la comarca berciana, ya no hay año que el catador abulense no pise el Bierzo para catar nuevos vinos.
?Estoy muy contento, han sido tantos años luchando que no lo asimilas, estoy muy emocionado. Es un día de muchos recuerdos, de recordar a los que ya no están", dijo Pérez al enterarse de que al fin había copnseguido alcanzar la cima de la lista Parker. "Lo estamos celebrando, pero sólo puedo pensar en la gente que se ha quedado por el camino", aseguraba en declaraciones a la agencia Ical.
La historia personal y profesional de uno de los grandes enóloos del mundo no ha sido nada fácil, ¿acaso alguna lo es? Con todo, ha conseguido llevar los vinos del Bierzo por todo el mundo. Y lo que le queda.