El actor gallego afincado en Valladolid Javier Varela está en un momento dulce. Cuando se le pregunta qué tal le va la vida, la contestación es reveladora:"No me puedo quejar nada". Siempre pone por delante a su familia ante cualquier otra circunstancia. Porque "la familia es lo primero". "Pero es que además, como dice mi amigo Zahera, la suerte para un actor es poder trabajar y a mí, de momento, el trabajo no me falta". Con lo cual la ecuación es completa: trabajo y familia.
Así lo deja claro durante esta divertida entrevista, nueva entrega de Cerveceando, con Pedro Santa Brígida. El sol aún baña las Moreras y en la Pera Limonera se respira sosiego, el mismo que le pone a su exitosa carrera el actor que acaba de terminar el rodaje de la segunda parte de Memento Mori en Valladolid.
"Ya hemos acabado de grabar la segunda temporada, está en el horno y tengo la sensación de que va a superar todas las expectativas, crece la serie y crecen los personajes. El espectador va a estar enganchado desde el primero de los cinco capítulos, que es lo que siempre hemos buscado". Varela interpreta a Álvaro Peteira, uno de los personajes policiacos creados por César Pérez Gellida en la novela que adapta la serie. Bromea Varela con su condición de poli en muchas de las series. "Ya soy uno más en el Cuerpo (risas), cuando hay un papel policiaco siempre suena mi nombre".
Repasa Javier Varela su filmografía con participación en proyectos importantes como As Bestas. "No me puedo quejar, últimamente estoy participando en muchos proyectos que están llegando al público, con muy buena crítica, pero yo siempre intento quedarme con las experiencias y al final en As Bestas tuve la oportunidad de trabajar en un equipo de mucho nivel, con una historia muy interesante que ha llegado a la gente". Mantiene una gran amistad con Luis Zahera: "Un grande del cine, un actor maravilloso y una grandísima persona a la que aprecio mucho".
Le embarga la morriña cuando habla de su Chantada natal, en Lugo. Regresa siempre que puede para "pisar la tierra". "Cuando llevas tanto tiempo fuera siempre hay una necesidad de volver y saber que todo está bien. Echo mucho de menos mi tierra, aunque en Valladolid soy feliz". Y afloran los recuerdos de su infancia. "Mis padres tenían el típico mesón de pueblo, el mesón Amistade, y esa fue mi verdadera escuela; porque la hostelería en los pueblos tiene también un componente psicológico".
Habla Varela de su responsabilidad en cada papel "sea pequeño, mediano o mayor". "Cada trabajo te permite una visibilidad, y me sigo tomando todo como si estuviera en la casilla cero de mi carrera, para seguir ilusionándome". Las circunstancias le han alejado un poco de los proyectos televisivos, Pero no se olvida de su pasado como presentador. "La televisión gallega es mi casa, es cierto que me siguen proponiendo cosas aunque últimamente no he podido coincidir en esos proyectos. Lo que tengo muy claro es que si en algo no voy a estar al cien por cien, prefiero decir que no; quiero seguir siendo honesto conmigo y con el oficio".
Dice el actor que desde hace seis años hay un "Javier más importante". "Hay un Javier padre que tiene dos hijos que pasa a ser la primera prioridad: mis hijos, mi mujer y mi trabajo". Por eso me conformo en el futuro ver a ese Javier que es un buen padre, un tío normal y corriente y que sus hijos sean buenas personas".