El Partido Popular podría rozar la mayoría absoluta en Castilla y León el próximo 13 de febrero, al lograr el 40,3% de los votos, según el panel elaborado por Sigma Dos para El Mundo. Se trata de casi diez puntos más que en los pasadas elecciones de 2019, lo que daría a la formación entre 37 y 42 procuradores, frente a los 29 con que ha contado en esta legislatura. Mientras, Vox tendría la llave de la gobernabilidad al duplicar sus votos y convertirse en la tercera fuerza en las Cortes autonómicas. Los de Abascal pasarían de un procurador a obtener entre cinco y nueve, recoge Ical. La mayoría absoluta son 41 procuradores.
Por su parte, el PSOE perdería cuatro escaños, al pasar de los 35 a los entre 27 y 31, al ver reducidos sus resultados apenas tres puntos, de un 35,2% a un 31,9%. Mientras, Ciudadanos vería trasvasados sus votos al PP, al pasar de un 15,1% a un 5,1%, con lo que perdería once procuradores, al quedarse con uno.
Podemos, que irá a las urnas con IU, crecería 0,7 puntos, y logaría un escaño más, de modo que pasaría de dos a tres. La formación Por Ávila podría desaparecer del arco parlamentario y perder su actual procurador y UPL estaría cerca de lograr un segundo escaño.
El PP se impondría en ocho de las nueve provincias y sólo en Soria el PSOE superaría a los populares, con un 38,6% frente al 36,5% del partido que lidera Alfonso Fernández Mañueco.
El efecto de la España Vaciada no se ve apenas reflejado en la encuesta, que se elaboró entre el 14 y el 23 de diciembre, cuando la formación aún no había cerrado oficialmente sus listas. En Soria, donde el movimiento es más fuerte con Soria ¡Ya!, podría restar un diputado al PSOE.
Respecto a la valoración de líderes, Fernández Mañueco es el candidato mejor visto entre los electores y el único que aprueba, con un cinco. Ocho décimas por debajo está el candidato de Cs, Francisco Igea, con un 4,2, seguido por el líder del PSOE, Luis Tudanca, que logra un 4,1. Pedro José Pascual Muñoz (XAV) logra un 3,5 y Luis Mariano Santos (UPL), un 3,3. Fátima Pinacho, portavoz de Vox hasta la fecha, recibe un 3,1, una décima menos que Pablo Fernández, de Podemos.